ROMULO FERNANDEZ MEDINA
Las MIPYMES en promedio en América Latina somos el 95% y en el caso de
Perú 99% con la generación de empleo en promedio del 80% PEA y del 60% al PBI.
Las MIPYMES son los aliados estratégicos de nuestros países, principal aliado
en la paz social a diferencia de los sindicatos laborales, quienes a menudo
afectan el orden público, el esfuerzo de los emprendedores MIPYMES y por cierto
afectan la imagen país.
Sin embargo, es este sector el más incomprendido por los gobiernos de
turno, en particular en el Perú no se ha logrado a establecer políticas de
estado que brinden aliento al desarrollo sostenible, sólo se han desarrollado
actividades con pocos resultados en materia de competitividad.
Sin embargo a nivel del sector MIPYMES a puro esfuerzo ha logrado
desarrollo, basta echar un vistazo a los emporios comerciales de las Malvinas,
Gamarra, Mesa redonda, Av. Grau, la Parada, la Victoria, Caquetá y otros
manejándose con un promedio de bancarización de 6 millones de dólares diarios
por emporio.
Las MIPYMES en el Perú han sido y son sujetas de una serie de estudios,
entre ello podemos destacar los puntos de vista que viene emitiendo el Banco
Mundial desde hace más de dos décadas, entre ello, destacó la canalización de
aproximadamente 5 mil millones de dólares US, hacia proyectos cuyo objetivo fue
aumentar la oferta de crédito a los pequeñas y microempresas.
Ahora habría que preguntarnos ¿Cuál ha sido su impacto en el sector?. La
respuesta estaría, se beneficiaron principalmente algunas ONGs cuyos directores
han caminado de la mano con la politiquería y claro manejando muy bien los
“Lobbies”. Lo cierto, es que la mayoría de esos proyectos han estado mal
concebidos y su impacto económico ha sido reducido afirma J.D. von Pischke,
destacado economista y ex-funcionario del Banco Mundial.
Hoy día estamos en la expectativa de la voluntad política expresada por
el actual Gobierno del Presidente Ollanta Humala y su Ministro de la Producción
Mag. Jose Urquizo M, donde al parecer como parte de la inclusión social ha sido
el destinar en un primer momento 385 millones de dólares para comparas del
estado a las MYPES, con la cual a parecer cambia de enfoque a aquella del
engaño por algunas migajas tipo antalgina para adormecer conciencias y empujar
a resignaciones.
La experiencia ha demostrado que el principal obstáculo para la
promoción de las MIPYMES y en particular a la micro empresa, no sólo es su
dificultad del acceso al crédito, sino más bien por la ausencia de
instituciones públicas y privadas manejadas eficientemente, capaces de ofrecer
asistencia técnica y capacitación especializada, con calidad que garantice al
sector su competitividad. El Estado se ha mostrado indiferente, de espaladas al
sector y carente de mística para impulsar un plan de largo aliento con una
prospectiva consistente basado en lo geográfico y sectorial, evitando de
hacer duplicidad de esfuerzos y gastos en charlitas, conversatorios,
retiros etc, sin metas medibles y cuantificables que estén a la luz de todos
sus usuarios.
Considero, que, sí el Poder Ejecutivo y el Congreso de la República
incluido los Gobiernos Regionales y Locales, ubican en sus agendas como
prioridad a las MIPYMES como aliados estratégicos, podríamos ubicar a nuestro país entre los grandes competidores
del mundo, convirtiendo a las MIPYMES en capaces de utilizar adecuadamente los TLCs en pro de nuestra
economía peruana. Para ello, se requiere de un plan nacional para el sector,
fortalecimiento de la institucionalidad, acceso a finamiento competitivo,
sinceramiento tributario, políticas de estado entre ello lo referido a la
productividad y competitividad, entre otros. Como sostiene el economista
peruano Lindon Vela Meléndez: “Para lograr el crecimiento sostenido con equidad
en el largo plazo se requieren políticas y programas que faciliten la
participación de los pobres en el proceso de crecimiento mismo. Esto se
logrará:
§ Creando
oportunidades de empleo más estables y mejor remuneradas
§ Aumentando el
acceso de los pobres a los activos productivos, y
§ Aumentando la
productividad de sus activos (tanto su capital físico como, principalmente. su
capital humano)”.
Y claro sin descuidar lo dicho por el Eco. Hernando de Soto desde la
década pasada sobre la importancia de la formalización partiendo por el
patrimonio.
Sigamos trabajando en la construcción de nuestros sueños, que sólo así
podremos descansar con felicidad
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