Gracias a un algoritmo, el aparato edita pequeños videos que luego pueden ser compartidos en las redes sociales
Los brasileños Bruno Gregory, Marcelo Do Rio y Márcio Saito,
cofundadores de la star-up Graava, acaban de asumir una difícil tarea:
competir en el mercado de las cámaras de acción
estadounidense, dominado por la GoPro y competidores como Sony y
Panasonic. Pero para competir, llevan una carta bajo la manga.
La cámara utiliza un algoritmo para crear pequeños clips a partir de todo
el material 'crudo' filmado, lo que ahorra horas de trabajo de edición. La
función no tiene precedentes y puede atraer a los consumidores que quieran
crear cortometrajes para compartirlos en las redes sociales pero que no tienen
los conocimientos técnicos.
"No tenemos cómo competir con la
GoPro, pero ofrecemos un enfoque diferente", dice Do Rio,
conocido en dicho país por fundar la fábrica de cerveza Wanton.
"Nuestro público no es el profesional, sino que nos dirigimos al
consumidor promedio. Es para la persona que va a dar un paseo en bicicleta y
luego no tienen tiempo o conocimiento para seleccionar las mejores partes del
vídeo. Bromeamos que somos el 'No Pro'", comenta.
Gregory, Saito y Do Rio se reunieron en Silicon Valley, y el año
pasado fundaron esta iniciativa. El objetivo era crear una cámara con un software de inteligencia artificial capaz de seleccionar
los mejores momentos de un vídeo, de la misma manera como una persona. Y así se
hizo. Graava entró en preventa el 5 de julio por 249 dólares, con la
entrega prevista para el primer trimestre del próximo año. Al llegar a las
tiendas, el equipo tendrá un costo de 399 dólares.
Algoritmo y sensores de
hardware
La lógica detrás de la cámara es hacer marcas en el vídeo de acuerdo con los datos recogidos
por los sensores incorporados en la cámara para luego seleccionar los
mejores momentos. El aparato obtiene información de la imagen del sensor,
micrófono, acelerómetro, GPS y monitor de ritmo cardíaco (a través de los
relojes inteligentes de Apple o Android). De este modo, el dispositivo es capaz
de 'catalogar' el video. Paisajes coloridos y animados, por ejemplo,
reciben una 'nota' mayor que otros más monótono.
Si uno desea escoger un momento para
que se incluya en el video, puede hacerlo a través de un comando de
voz. El Graava también permite al usuario elegir la banda sonora de su propia
biblioteca, y el resultado final será sincronizada con la música. El proceso,
sin embargo, no es instantáneo, pues varía dependiendo de la duración del video
en "bruto". Todo el proceso se realiza en la nube, y el archivo RAW
se puede mantener en la cámara o computadora.
Un detalle que llama la atención es que Graava no necesita cables. La recarga de la batería se realiza mediante
la inducción electromagnética y la transferencia de datos usando la red
Wifi. Con esto, después de un día de rodaje acaba de poner la cámara sobre la base de recarga y se sincronizan los datos
automáticamente.
"Con
las cámaras actuales es necesario grabar, descargar las imágenes en la
computadora, utilizar un software de edición, seleccionar una banda
sonora y luego subirlo a Internet. El flujo de trabajo es muy lento.
Nuestro objetivo es facilitar al máximo este proceso", asegura el
empresario.
El
producto aún no está disponible en Latinoamérica. Según Do Rio, cualquier
persona puede comprar el producto al sitio, pero los derechos de importación y
el tipo de cambio alto hacen que sea prácticamente inaccesible para el
consumidor de la región. Sin embargo, en función del rendimiento de las ventas,
es posible que en el futuro la empresa decida vender Graava a América Latina.
http://elcomercio.pe/tecnologia/inventos/graava-camara-inteligente-que-graba-y-edita-vez-noticia-1831821
Comentarios
Publicar un comentario