RETOS DE LA EDUCACIÓN EN LORETO

La conmemoración del Día Mundial de la Educación es una oportunidad valiosa para reflexionar acerca de los retos que tenemos como sociedad Loretana en nuestra educación. Coincidiremos con muchos que no son pocos los retos, pero también no seremos pocos los que nos propongamos afrontarlos, desde la posición y condición en que nos encontremos.
Es largo el camino que nos toca transitar, y muchos los retos que se tienen que afrontar, porque este camino en parte ya andado por otros, de ahí la teoría y la tecnología, pero otros tramos nos queda irlo definiendo, como parte de un proceso de construcción de NUESTRA EDUCACIÓN.
Hay una demanda grande de visualizar la, de hecho sinuoso y larga, ruta que nos debe ir dando cuenta y tomando posesión de aquel instrumento que debe permitirnos acercarnos progresivamente a esa sociedad inclusiva para todas y todos; reconocidos individual y colectivamente; expresados en nuestras grandes virtudes, como personas y como pueblos.
Entonces, ¿Cuáles son los principales retos que debemos enfrentar para mejorar la educación en Loreto?
Con especial interés de poner en mesa puntos para el debate y el intercambio de apreciaciones, me atrevo a indicar algunos retos, que considero son de entrada, o de condiciones previas:

LA NECESIDAD DE FORTALECER LA INSTITUCIONALIDAD DEL SECTOR
Una afirmación en este sentido: Es imposible una educación de calidad sin un servicio educativo de calidad, ofrecido por un sector de calidad. Sin mucho aspaviento, en un afán de reconocimiento totalmente colectivo: nuestro sector es de baja calidad, por eso el servicio que presta es de precaria calidad y sus resultados son de pobre calidad. Por lo tanto, tenemos escasas posibilidades de avanzar en nuestra mejora educativa si es que no realizamos los esfuerzos necesarios para mejorar la institucionalidad del sector.
Ahora, esto no es un drama sólo de la educación; la institucionalidad en el país es altamente vulnerable; es uno de los grandes lastres social, político y cultural que nos ancla e impide dar mayores impulsos a un desarrollo integral.
Uno observa que muchos esfuerzos de mejora de nuestro sector se concentran principalmente en uno de los componentes del servicio que se presta, lo pedagógico, la labor de la escuela y del maestro, en una mirada pedagogicista del sistema educativo; y se ignora o desestima en gran  medida la gestión institucional, del sector, no sólo de la escuela, principalmente de la matriz regional y sus satélites provinciales. Como vemos, muchos de esos empeños implican ingentes recursos que no se ven reflejados en los resultados que se obtienen.
Digo, reitero, demando, los esfuerzos mayores, de la sociedad y del estado, en fortalecer nuestra institución matriz, ello debe traer en consecuencia, en cascada, las mayores ganancias para nuestra educación.
Ahora, ¿Qué implica o qué se entendería por mejora de la institucionalidad de nuestro sector educación?
Es un esfuerzo de análisis, que llevan a propuestas, que podemos realizarlo de manera conjunta.

NECESIDAD DE ACLARAR LO MÁS POSIBLE EL HORIZONTE A DÓNDE QUEREMOS LLEGAR
Más que nunca necesitamos tener lo más claro posible la ruta del mediano plazo, de hasta donde llegaremos en los próximos años que tenemos por delante. Es que actuar sin esa claridad es dar palazos al vacío, a la nada; con tanto esfuerzo pero escasamente inteligente, ya que se ha logrado tan poco, casi nada.
Digo que es una necesidad, porque no podemos ir más para adelante sin la lucidez necesaria. Ya no más, sino seguiremos haciendo más de lo mismo, es decir, nada o casi nada con nuestra educación.

NECESIDAD DE UN ACUERDO REGIONAL POR LA EDUCACIÓN
Un Acuerdo es posible, pero es difícil; es difícil, pero es muy posible. Y como lo decimos, es necesario. En torno a la educación en nuestra región, en el país, hay mucho ruido, creo que en exceso. Con tantas distracciones ha sido realmente imposible poner mirada en aquello en lo que tenemos que avanzar.
Un Acuerdo permitiría establecer las prioridades, de las tantas demandas expresadas por los diferentes sectores. Igualmente, el Acuerdo favorecería el involucramiento de todos al ser partícipe de las diferentes responsabilidades expresadas en compromisos. El Acuerdo debe tener claridad acerca de las metas a alcanzar y sobre los cuales nos corresponde rendir a todos los responsables, sin ellas nadie es responsable de nada.
Y en verdad, cuando dialogamos con diferentes actores, uno se percata de todo aquello que nos une en ideas y propuestas, que llega a pensar ¿porqué no hacemos esfuerzos conjuntos?, de todos los actores, de todos los sectores. Es evidente que pesa mucho la tradición, así hemos sido siempre, confrontados, lo cual es más fácil, más cómodo.
Retos de entrada o de condiciones previas, que nos corresponde trabajar desde donde nos ubiquemos. Creo que no es sólo responsabilidad del Estado o el Gobierno, creo que en la mejora de estas condiciones previas podemos poner de nuestra parte todos. Claro que le corresponde liderar al gobierno, al regional está claro. Pero aún en su ausencia en liderar, podemos encontrar resquicios para hacer posible una un camino, como el caminante que hace huella al caminar.

http://diariolaregion.com/web/2015/04/01/retos-de-la-educacion-en-loreto/